Hay una parte de mí que no te enseñé,  valiosa,

 y no por miedo al rechazo, tanto si no porque

en tu insonora alma, no sonaría nada.

Hay una parte de mí que no enseñé al mundo

No por egoísmo, sino por la simpleza que de ello trataba.

Hay una parte de mí, que no conoce nadie…

Quién se sonroja soy yo, y las causas son mías.

Quién critica y más tarde se arrepiente no es otra más que yo.

Quién siente más profundo soy yo y

Quién ve todo absurdo-hoy- soy yo.

Al fin y al cabo soy yo la que escribe esto y para mí será el sonido

Que no compartiré nunca

El sonido que da magia a los momentos vacios…

El sonido secundero

El sonido bello

El sonido que me invade cuando solo estoy sola

El sonido que…

Es mi sonido

María Fuentes.